El CAAD Penedès trabaja incansablemente por el bienestar de perros y gatos abandonados, promoviendo la adopción responsable y la concienciación ciudadana.
Si los animales acogidos en el CAAD Penedès pudieran hablar, seguramente nos hablarían de nuevas oportunidades, de manos que los acarician y de familias que los esperan. Ana Martínez, veterinaria y directora del centro, nos ha abierto las puertas de esta realidad en
Patitas al Aire, explicando la labor imprescindible que llevan a cabo para combatir el abandono y garantizar una vida digna a los animales domésticos de la zona.
En el CAAD Penedès, ubicado en la Mancomunitat Penedès-Garraf, se acogen cada año cerca de 1.700 perros y gatos que llegan en situaciones muy diversas: animales perdidos, abandonados o incluso procedentes de casos de maltrato. Gracias a un equipo comprometido, voluntarios y familias de acogida, el centro trabaja para darles bienestar hasta que encuentren un hogar definitivo. Porque, como recalca Ana Martínez,
“los barrotes, aunque sean de oro, siguen siendo barrotes”.
El centro no solo recoge y cuida a los animales, sino que también realiza importantes labores de esterilización en colonias de gatos y fomenta la adopción responsable. La esterilización es un pilar fundamental para frenar el abandono, ya que dos de cada cuatro animales acogidos en el centro son cachorros procedentes de camadas no deseadas. A través de programas educativos en colegios y campañas de concienciación, también luchan por inculcar la importancia de la identificación y la tenencia responsable.
Una de las iniciativas más valiosas es el programa de
casas de acogida, que permite que perros y gatos con necesidades especiales o en recuperación encuentren un entorno familiar temporal. Como explica Ana, muchos animales bloqueados o en estado de estrés dentro del centro se transforman en hogares de acogida, mostrando su verdadero carácter y facilitando su adopción definitiva.
Para quienes desean colaborar, el CAAD Penedès ofrece múltiples formas de hacerlo: desde el voluntariado, donde se brinda tiempo y amor a los animales, hasta donaciones materiales como mantas, comida o medicamentos. Y aunque, por ser un centro público, no pueden aceptar donaciones económicas, cualquier gesto cuenta para mejorar la calidad de vida de estos animales.
Ana Martínez nos recuerda que tener un animal no es una decisión ligera.
“Adoptar es un compromiso para toda la vida. Son seres vivos que necesitan tiempo, dedicación y amor”. La adopción responsable no solo transforma la vida de un animal, también enriquece la de las personas que los reciben.
El CAAD Penedès es un ejemplo de cómo la colaboración entre instituciones, voluntarios y ciudadanos puede generar un cambio real. Porque cada perro o gato que encuentra un hogar es una historia de esperanza, y cada esfuerzo cuenta en la lucha contra el abandono.
Para más información, adopciones o colaboraciones materiales, puedes visitar su página web oficial o seguir sus redes sociales. Porque sí a la adopción, sí a la esterilización y sí al compromiso.